meditarP.- Definitivamente, Maestro, ¿quién no sabe meditar no disuelve el Ego?

R.- No, pues no puede comprenderlo. Si no hay comprensión, ¿cómo podría nadie disolver el Ego? Primero es necesario adquirir conciencia de lo que se medita para luego disolverlo.

P.- Siendo esto así, ¿opina usted que el estudiante gnóstico debe meditar diariamente?

R.- Los gnósticos deberían practicar la meditación por lo menos cuatro o seis horas diarias, practicar en la mañana, en la tarde y casi toda la noche, hasta que amanezca. Esto debe hacerse durante toda la vida, y si así proceden vivirán una vida profunda y se auto-realizarían. De no hacerlo llevarán una vida superficial, hueca, una vida de crónica, algo así –dijéramos- como un charco de poca profundidad. Bien sabemos que un charco a la orilla de un camino y bajo los rayos del sol, se seca y lo que queda es la podredumbre. Muy distintos son los lagos profundos, llenos de peces y de vida. Debemos, pues, aprender a vivir profundamente y esto se logra con la meditación.

P.- Maestro, cierta vez se le preguntó a un Instructor cuánto tiempo debería durar una meditación y contestó: 10 minutos. ¿Qué opinión le merece esta respuesta?

R.- Toda meditación debe durar horas: tres, cuatro, seis horas. Ya en el “Vacío Iluminador” no hay tiempo. La falta de profundidad en los aspirantes es lo que perjudica a los hermanitos.

P.- ¿Quiere decir que no hay seriedad en los aspirantes a la Gnosis?

R.- ¡Eso es claro y manifiesto! La meditación debe ser honda, profunda, prolongada…

   LA IMPORTANCIA DE EXPERIMENTAR LO REAL

 “La experiencia de lo Real resulta imposible mientras la Esencia, el Buddhata, el Alma, esté embotellada entre el dualismo intelectual. Las opiniones contrapuestas, el batallar de losconceptos opuestos, las ideas antitéticas, corresponden a los  diversos funcionalismos ilusorios de la mente”.

Es necesario comprender la necesidad de la experiencia de lo Real, es necesario que los hermanos se entrenen –ciertamente- en la meditación.

Solamente es posible llegar a la experiencia de la Verdad a través de la técnica de la meditación, sólo en ausencia de la mente podemos nosotros vivenciar lo Real, y cuando realmente lo experimentamos, venimos a sentir en nosotros mismos un elemento que nos transforma radicalmente.

No hay duda, mis caros hermanos, que la disolución del “Yo” suele ser un trabajo arduo y difícil; por eso es que la experiencia de lo Real en ausencia del “Yo”, en ausencia de la mente, es muy útil y necesaria porque al vivenciar –repito- la Verdad, acumulamos en nuestro interior ciertas fuerzas que nos permiten luchar con más ventaja contra el Ego, contra el “Yo”.

yogaDesafortunadamente la mente vive en incesante parloteo, no está quieta un instante, ni siquiera hemos aprendido a pensar sin palabras y eso es muy lamentable; necesitamos de algún idioma para pensar, pero interesante sería pensar sin palabras.

La mente está dividida –incesantemente- en un batallar de antítesis, en la lucha de los opuestos; una mente, así dividida, no puede experimentar la Verdad.

Jesús El Cristo dijo: “Conoced la Verdad y ella os hará libres”, pero no sería posible la experiencia de la Verdad mientras la mente esté dividida en un batallar de antítesis. Cuando la mente está quieta, cuando la mente está en silencio, adviene lo nuevo.

Si queremos la experiencia de la Verdad necesitamos aprender a formar el “Vacío Iluminador” en nosotros mismos. Raros son aquellos que han llegado a formar el VACÍO ABSOLUTO.

Obviamente se necesita para ello de una BOMBA DE SUCCIÓN. La tenemos, afortunadamente, relacionada con nuestro sistema respiratorio, con los canales extraordinarios de “IDÁ” y “PINGALÁ”, a lo largo de los cuales fluye el “PRANA”.

Necesitamos también de un DINAMO y lo tenemos: la VOLUNTAD. Necesitamos de un APARATO GENERADOR DE ENERGÍAS y él está establecido en nuestro organismo, en los ÓRGANOS CREADORES.

Tenemos que aprender a manejar esos instrumentos, si es que queremos de verdad experimentar lo Real.

El “Vacío Iluminador” es el SANTO OKIDANOCK, omnipresente, omnipenetrante, omnisciente. Es claro que el “Vacío”, el Santo Okidanock, deviene originalmente del SAGRADO SOL ABSOLUTO. Cada Sistema Solar tiene su Sagrado Sol Absoluto y el nuestro no es una excepción. De allí deviene el Santo Okidanock, el activo Okidanock.

Antes de la manifestación el Okidanock contiene –en sí mismo- las tres fuerzas primarias de la creación. Quiero referirme, en forma enfática, al Santo Afirmar, al Santo Negar y al Santo Conciliar. Al iniciarse la aurora del Mahanvantara, el activo Okidanock conteniendo en sí mismo los tres factores básicos de toda creación, penetra en los mundos más no queda involucrado en los mismos.

Guarda paralela exacta con esta afirmación el Santo Okidanock de nuestro planeta Tierra. Cuando se inició el alba del Mahanvantara penetró en este, nuestro mundo, más no quedó involucrado en el mismo.

Así fue como el Santo Okidanock se desdobló –a sí mismo- en las tres fuerzas primarias. Éstas, en la India, son Brahama, Vishnú y Shiva; en el mundo occidental son Padre, Hijo y Espíritu Santo; entre la antigua humanidad egipcia son Osiris, Isis y Horus. Son tres fuerzas trabajando, cada una en forma auto-independiente, pero se mantienen sin embargo adheridas al Santo Okidanock.

Es mediante esas tres fuerzas primarias como el Divino Arquitecto ha podido crear el Universo, pero al finalizar el Gran Día Cósmico, al finalizar el Mahanvantara, las tres fuerzas vuelven a fusionarse, a integrarse con el Santo Okidanock para regresar al Sagrado Absoluto Solar.

Esto que vemos en lo macrocósmico, esto que vemos en los mundos, se repite también dentro del microcosmos-hombre. Dentro de cada uno de nos, en el fondo más profundo de nuestra Conciencia, en las raíces misma de nuestro Ser, está el Santo Okidanock omnipresente, omnipenetrante, omnisciente, que es el que nos une al Sagrado Sol Absoluto.

Obviamente él, el Santo Okidanock, se eliminó a sí mismo, o mejor dijéramos se desdobló a si mismo en esos tres factores que son conocidos como Brahama, Vishnú y Shiva, nuestro Padre muy amado, el Hijo muy adorado y el Espíritu Santo muy sabio.

Necesitamos nosotros, mis queridos hermanos, pasar más allá de todas las fuerzas positivas y negativas de la Naturaleza. Aún más: más allá de los tres factores primarios de la creación, en su manifestación o proceso incesante de modificación.

Necesitamos escaparnos del intelecto, pasar más allá del cuerpo, de los afectos y de la mente. Durante la meditación necesitamos que la mente quede quieta por dentro y por fuera y en el centro. Cuando la mente está quieta por dentro, por fuera y en el centro, adviene el TAO, es decir, lo REAL.

Si decidimos formar el “Vacío Iluminador” en nosotros, es obvio que llegaremos a experimentar el Santo Okidanock.

Quiero decir también, en forma enfática a los hermanos que están reunidos aquí esta noche, en tercera cámara, que la experiencia mística de lo Real suele ser un acontecimiento trascendental que hasta causa terror, por lo que hay que dejar el miedo.

Así pues, ya en el “Vacío Iluminador venimos nosotros a saber que tan sólo somos gotas del Gran Océano. Es en el Santo Okidanock donde la gota se pierde en el Océano y el Océano en la gota. La Conciencia entonces se diluye, se expande en forma tan extraordinaria que llegamos a sentirnos convertidos en árboles, en montañas, en aves, en mundos, en cometas que ruedan a través del espacio infinito.

En el Santo Okidanock, al verse uno convertido en árbol, en agua, etc., siente temor por la aniquilación y ese pavor por la muerte suele ser insoportable. Entonces se pierde inmediatamente el éxtasis  y vuelve uno al mundo de las formas. Más si uno tiene valor y sabe aguantar aquello, comprenderá que más allá de toda aspiración está la Gran Realidad, que es el Sagrado Sol Absoluto.

Si el temor no logra hacernos perder el éxtasis, llegaremos al Sagrado Sol Absoluto. Allí es donde vendremos a experimentar la Verdad, allí conoceremos las leyes de la Naturaleza tal cual son.  En este mundo sólo conocemos la mecánica de los fenómenos, las asociaciones mecánicas y los efectos, pero en el Sagrado Sol Absoluto conocemos las leyes de la Naturaleza en sí mismas.

Todo el mundo está contenido en el Sagrado Sol Absoluto Omni-Inteligente; el pasado y el futuro se hermanan allí en un eterno AHORA, dentro de un eterno PRESENTE. Allí conocremos, pues, todo lo que ha sido y todo lo que será; allí estaremos más allá del tiempo y mucho más allá de la mente.

Cuando nosotros experimentamos la Verdad sentimos un impulso interior formidable que nos permite luchar vcntajosamente contra el “Yo”, contra el “mi mismo”, para desintegrarlo. Por ello, precisamente, es que debemos nosotros aprender a formar el “Vacío Iluminador”. Se hace necesario usar el APARATO GENERADOR, la BOMBA DE SUCCIÓN y el DINAMO.

Incuestionablemente el APARATO GENERADOR produce energías que ascienden por los canales-espinales de “Idá” y “Pingalá”. Debemos aprovechar la energía sexual para el “Shamadí”. Formar el Sol Absoluto en el “Vacío” es lo importante, y se puede.

Sentados nosotros en cómoda posición, inhalar, y al inhalar el “PRANA” imaginamos que la energía sube desde los órganos creadores hasta el cerebro. Se inhala con el mantram HAM (JAM) y se exhala con el mantramn SAH (SAJ). HAM-SAH es el mantram de la meditación.

 ORACIÓN Y MEDITACIÓN

  meditation-courses1Video sobre los Chakras “La meditación es la práctica fundamental e indispensable para transformar la Conciencia humana en la Sabiduría Iluminada del estado de Buda. Durante la meditación olvida que estás en meditación, no pienses que estás meditando, porque cuando se piensa que se medita, este pensamientobasta para turbar la meditación. Tu mente debe quedar vacía paraexperimentar lo Real”.

(Enseñanzas gnósticas orientales)

La irrupción del “Vacío”, la experiencia en el “Vacío Iluminador”, sólo son posibles cuando la Esencia, el Alma, el Buddhata, se libera de la botella intelectual.

La Esencia está embotellada entre el tremendo batallar de los opuestos: frío y calor, gusto y disgusto, si y no, bien y mal, agradable y desagradable.

Cuando la mente está quieta, cuando la mente está en silencio, entonces la Esencia queda libre y viene la experiencia de lo Real en el “Vacío Iluminador”.

Orad, buen discípulo, y luego con la mente muy quieta y en silencio, vacía de toda clase de pensamientos, aguardad la respuesta del Padre. “Pedid y se os dará, golpead y se os abrirá”…

Orar es conversar con Dios, y ciertamente hay que aprender a conversar con el Padre, con Brahama.

El Templo-Corazón es casa de oración. En el Templo-Corazón se encuentran las fuerzas que vienen de arriba con las fuerzas que vienen de abajo, formando el Sello de Salomón.

Es necesario orar y meditar profundamente, es urgente saber relajar el cuerpo físico para que la meditación sea correcta.

Antes de empezar las prácticas de oración y meditación combinadas, relajad bien el cuerpo.

Acuéstese el discípulo gnóstico en posición decúbito-dorsal, es decir, tendido de espaldas en el suelo, o en una cama, piernas y brazos abiertos a derecha e izquierda, en forma de Estrella de cinco puntas.

Esta posición de ESTRELLA PENTAGONAL es formidable por su honda significación, pero las personas que por alguna circunstancia no puedan meditar en esta posición, entonces que mediten en posición de hombre muerto : talones juntos, puntas de los pies abriéndose en forma de abanico, brazos contra los costados sin doblarse, colocados a lo largo del tronco.

Los ojos deben estar cerrados para que las cosas del mundo físico no os distraigan. El sueño, debidamente combinado con la meditación, resulta muy indispensable para el buen éxito de la meditación.

Es necesario tratar de relajar todos los músculos del cuerpo y luego concentrar la atención en la punta de la nariz hasta sentir plenamente el pulso del corazón en ese órgano del olfato. Luego seguiremos con la oreja derecha hasta sentir el pulso del corazón en ella; después continuaremos con la mano derecha, pie derecho, pie izquierdo, mano izquierda, oreja izquierda y nariz nuevamente, sintiendo plenamente el pulso del corazón –por separado- en cada uno de estos órganos donde hemos fijado la atención.

El control del cuerpo físico comienza con el control sobre el pulso. El pulso del corazón tranquilo se siente de una vez todo, en su totalidad, dentro del organismo, pero los gnósticos pueden sentirlo a voluntad en cualquier parte del cuerpo, ya sea la punta de la nariz, una oreja, un brazo, un pie, etc.

Está demostrado –por la práctica- que adquiriendo la posibilidad de regular, apresurar o disminuír el pulso, pueden apresurarse o disminuirse los latidos del corazón.

El control sobre las palpitaciones del corazón no puede jamás venir de los músculos del corazón, sino que depende totalmente del control del pulso.

El control del pulso o control del segundo corazón se logra totalmente mediante la absoluta relajación de todos los músculos.

Mediante la ATENCIÓN podemos acelerar o disminuír las pulsaciones del segundo corazón y los latidos del primer corazón.

El Shamadí, el Éxtasis, el Satori, se suceden siempre con pulsaciones muy lentas, y en el Maha-Shamadí las pulsaciones terminan.

Durante el Shamadí, la Esencia o Buddhata se escapa de la personalidad y entonces se fusiona con el Ser y viene la experiencia de lo Real en el “Vacío Iluminador”.

Sólo en ausencia del “Yo” podemos experimentar lo Real, lo verdadero, aquello que no es del Tiempo.

Sólo en ausencia del “Yo” podemos platicar con el Padre, con Brahama.

Orad y meditad para que podáis escuchar la Voz del Silencio.

Samael Aun Weor,

“Tratado Esotérico de Astrología Hermética”.  

EL MANTRAM GATE-GATE PARAGATE  PARASAMGATE BODI SWAHA

 “Es necesario saber meditar, comprender lo que es la meditación. El objetivo de la meditación es muy simple: ¿Qué es lo que buscamos nosotros a través de la meditación? ¡Tranquilidad! Parecería muy superfluo lo que estamos diciendo. Ustedes podrían objetarme diciendo que podríamos tranquilizarnos con una botella de vino. Podrían objetarme diciendo también que podríamos tranquilizarnos oyendo una Sinfonía de Beethoven, pero en realidad de verdad conseguir la tranquilidad es lo más difícil que imaginarse puedan. Nadie podría tener tranquilidad, meditar y tener su mente en santa paz si no ha eliminado previamente, de su centro intelectual, todo el pensar caduco y extemporáneo; nadie podría tener paz en su corazón si no hubiera elimina de sí mismo, previamente, las emociones negativas y perjudiciales”.

Necesitamos que ustedes aprendan a meditar profundamente, que sepan meditar. Cuando uno ha conseguido la auténtica concentración, llega a la verdadera dicha del Ser.

Cuando un Arhat Gnóstico trata de meditar, lo que busca es tranquilidad. En esos instantes se propone trabajar sobre algún elemento inhumano que haya descubierto en sí mismo mediante la auto-observación. Si descubrió la IRA, por ejemplo, se dedicará a comprender el “agregado psíquico” de la IRA para disolverlo con la ayuda de su Divina Madre Kundalini, que deberá invocar. Y si tal vez descubrió que tiene el “agregado psíquico” del ODIO, entonces se propondrá comprender y desintegrar tal “agregado” para que en su reemplazo surja el AMOR. A medida que uno va desintegrando todos esos “agregados psíquicos” e inhumanos que en nuestro interior cargamos, la Conciencia va despertando.

Ese tipo de meditación está dedicado a la auto-exploración del Ego con el propósito de desintegrarlo, de volverlo cenizas, pero hay otro tipo de meditación que tiene por objeto llegar –un día- a la experiencia de lo Real. Es obvio que quien lo consigue trabajará con gusto sobre sí mismo, trabajará con  ardor, pues habrá experimentado ciertamente, en ausencia del Ego, eso que es la Verdad, eso que está más allá del cuerpo, de los afectos y de la mente.

Sin embargo conceptúo que es necesario tener algún mantram que sirva.

El mantram que les voy a dar es muy sencillo: GATE-GATE PARAGATE PARASAMGATE BODI SWAHA. Este mantram se pronuncia así: GAAAAATEEE, GAAAATEEE, PARAGATÉ, PARASAMGATÉ, BODI SUA-JÁ –en nuestros corazones debe quedar grabado-.

Este mantram se pronuncia suavemente, profundamente, con todo el corazón. Puede también usarse con el VERBO SILENCIADO, pues hay dos tipo de verbo: VERBO ARTICULADO y VERBO SILENCIADO; el VERBO SILENCIADO es poderoso.

Este mantram entiendo que abre el “OJO DE DAGMA”; este mantram profundo, un día los llevará a experimentar –en ausencia del Ego- el “Vacío Iluminador”. Entonces sabrán lo que es el “SUNYATÁ”, entonces entenderán ustedes lo que es el “PRAJÑA- PARAMITA”. Perseverancia es lo que se necesita, con este mantram ustedes podrán llegar muy lejos…

Vamos a entrar en meditación con el mantram GATE-GATE PARAGATE PARASAMGATE BODI SWAHA.

Ruego a todos los hermanos, pues, entrar en meditación.

Se relaja el cuerpo totalmente. Después de relajado el cuerpo, nos entregamos totalmente a nuestro Dios Interior Profundo sin pensar en nada, únicamente recitando –con la mente y el corazón- el mantram completo.

La meditación debe ser muy honda, muy profunda; los ojos cerrados, la luz apagada, el cuerpo relajado, entregados completamente a nuestro Dios Interior.

Ni un solo pensamiento se debe admitir en estos instantes. La entrega a nuestro Dios debe ser total, solamente el mantram debe resonar en nuestros corazones.

No piensen en nada de nada, de nada, de nada… Recitaré el mantram, lo recitaré muchas veces para que no se les olvide: GAAATEEE, GAAAATEEE, PARAGATEEE, PARASAMGATEEEE, BODI SUA-JÁ…

Sigan repitiendo el mantram en sus corazones. No piensen en nada, entreguémonos a nuestro Dios, siéntanse como un cadáver, como un difunto…

 ¿CÓMO SE LOGRA LA TRANQUILIDAD?

 “La meditación debe ser correcta. Para investigar en los mundos superiores se necesita el pensamiento lógico y el concepto exacto. La comprensión es la auto-reflexión evidente del Ser”.

Samael Aun Weor

 P.- Maestro, usted estaba ahora diciéndonos que la meditación es, prácticamente, “poner la mente en blanco”, pero hay otro sentido de meditación que –por el contrario- es muy dinámico, que es concentrarse y pensar sobre un tema, lo cual indica una dinámica mental. O sea, ¿hay varios tipos de meditación?

R.- Existen muchos tipos de meditación, pero si es que nosotros queremos aprehender lo Real, si es que nosotros queremos experimentar la Verdad, si queremos sentir en nuestra psiquis ese elemento que nos transforma radicalmente, necesitamos de la quietud y del silencio de la mente. No se trata de “poner la mente en blanco” porque eso verdaderamente es absurdo; lo que se requiere es llegar a la quietud y al silencio de la mente, y eso es diferente. Pero “poner la mente en blanco” resulta en el fondo –y perdóneseme la palabra- hasta estúpido. Se necesita algo más que esa estupidez, se necesita quietud y silencio de la mente. Cuando el proceso del pensar se ha agotado, la mente se queda quieta y en silencio, y entonces adviene lo nuevo.

No se trata de combatir los pensamientos que lleguen para que la mente que la mente quede quieta. No, lo que se trata es de CONTEMPLAR esos pensamientos, de COMPRENDERLOS, contemplar esos deseos inteligentemente, contemplar y comprender todos los recuerdos que lleguen a la mente. Cuando uno va comprendiendo todo eso que llega al entendimiento, entonces no puede decirse ni una palabra. Pongamos que llegue a la mente el recuerdo de una escena de ira en la casa. ¿Qué hacer? Tratar de comprenderla. Y después de comprenderla, ¿qué? ¡OLVIDARLA! Si luego surge otro recuerdo, la conversación con el compadre, o con la comadre, o con el vecino, ¿qué hacer?  ¿Rechazar? ¡Absurdo! ¿Entonces qué? Meditar y comprender. ¡Comprendido, olvídelo! Qué surge el recuerdo de una partida de fútbol, ¿qué hacer, rechazarlo? ¡No! ¿Qué hacer? Repito: comprender la futilidad de aquello, la vanidad de aquello. Una vez comprendida a fondo, olvídelo. Y así todo ese desfile Ee pensamientos, de deseos, de sentimientos, de recuerdos, etc., tienen un principio y tienen un fin. Cuando esa cinta de recuerdos, deseos, pensamientos, emociones etc. ha terminado, la mente queda quieta y en silencio; entonces adviene lo nuevo. ¿Y si no adviene, diríamos, si a pesar de creer que ya estamos en quietud y en silencio nada sucede, ¿qué pasa? Sencillamente no hemos llegado a la quietud absoluta en todos los niveles de la mente. Entonces no nos queda más remedio que descender hasta niveles más profundos. Quiero decir con esto que llegada la quietud en el nivel meramente intelectual, debemos pasar entonces a la quietud en el segundo nivel, increpar a la mente, preguntarle por qué está así, por qué no quiere el silencio. La mente responderá con absurdos pensamientos, con sofismas. Nosotros debemos tratar de hacerle comprender a la mente las futilidades que siente, o su vanidad, y conseguido eso pasar a un tercer nivel; comprender pues, hacerle comprender a ese tercer nivel la necesidad de estar quieto, y así sucesivamente, de nivel en nivel, hasta alcanzar el nivel 49. Si lo logramos, si conseguimos que cada uno de los 49 niveles obedezca, entonces quedará la mente quieta y en silencio. El resultado será que la Esencia se desembotellará del intelecto para experimentar eso que transforma radicalmente: lo nuevo, lo Real.

No se trata, pues, de “poner la mente en blanco”, repito, porque eso es completamente absurdo, sino lograr la quietud y el silencio de la mente, que es diferente. Y si a pesar de  todas esas prácticas la mente no quiere quedar quieta y en silencio, habremos de recriminarla, de regañarla y hacerle ver su error, hasta de castigarla, y a élla no le quedará –al fin y al cabo- más remedio que vencerse y quedarse quieta y en silencio, y entraremos en éxtasis, en Shamadí; la Esencia se liberará del intelecto para experimentar lo Real.

 CONCLUSIONES

 “La meditación nos permite comer el pan supersubstancial, el pan de la sabiduría”.“Todos nosotros, en tanto no hayamos muerto en sí mismos, seremos unos pobres miserables y cuitados. El corazón de aquellos que tienen el Ego vivo y fuerte es un tumulto en el interior. Sólo el corazón tranquilo puede darnos la verdadera y legítima felicidad. La meditación interior profunda tiene por objeto lograr la verdadera tranquilidad.

No sería posible lograr la paz del corazón tranquilo en tanto existiesen dentro de nosotros los factores psicológicos de la intranquilidad. Durante la meditación interior profunda exploramos al “Yo” psicológico.

Durante la meditación interior profunda sólo nos proponemos comprender integralmente aquel defecto psicológico descubierto en auto-observación.

Cada defecto auto-observado debe ser previamente comprendido, a través de la meditación, antes de proceder a su eliminación. Oración y Magia Sexual son indispensables para la eliminación. Es en la Novena Esfera, durante la conexión del Lingam-Yoni, cuando se debe orar.

Así, eliminando los factores de la intranquilidad, lograremos la plena tranquilidad. Se suplicará en esos instantes a la Divina Madre Kundalini que desintegre y elimine aquel agregado psíquico que previamente hayamos comprendido. Sólo el corazón tranquilo puede llegar a la Iluminación y a la Omnisciencia.

En el Oriente se conocieron grandes ermitaños y anacoretas, viviendo en cavernas solitarias, que a fuerza de múltiples disciplinas lograron el éxtasis, más como no disolvieron el Ego fracasaron. Esos anacoretas se acostumbraron a desembotellar momentáneamente la Esencia, el Buddhata; entonces experimentaban el Satori, el Shamadí, más pasada esa experiencia mística volvían –como el Genio de la Lámpara de Aladino- a la botella.

Algunos de esos santos desencarnaron en pleno Maha-Shamadí; sin embargo hoy en día tales seres han retornado como personas vulgares, comunes y corrientes. Eran fuertes en Shamadí, pero al no trabajar sobre el Ego el resultado es el fracaso.La experiencia del Vacío Iluminador no significa la auto-realización del Vacío Iluminador”.

Samael Aun Weor, “Pistis Sophía” develada

“El VACÍO no es fácil de explicar, no es definible o descriptible; cualquier concepto que nosotros emitamos sobre él, puede fallar en el punto principal.  El VACÍO no puede describirse o en expresarse en palabras. Esto se debe  a que el  lenguaje humano ha sido creado, principalmente,  para designar cosas, pensamientos y sentimientos existentes; no es adecuado para expresar en forma clara y específica, fenómenos, cosas y sentimientos no-existentes. El VACÍO es, sencillamente, un término que denota la naturaleza no-substancial y no-personal de los seres, y una señal de indicación del estado de absoluto desprendimiento y libertad

V. M. Samael Aun Weor

Video sobre los chacras